Me cuesta mirarlo
Me cuesta concebirlo
No acepto los hechos
No quiero creer en la veracidad
de mis ojos
¿Qué hacer ante la muerte?
¿Qué hacer ante el rencor?
No quiero ser odio, envenena el corazón
La angustia es tan grande
que el cuerpo me lo torció.
La memoria es tortura
quisiera pensar que jamás existió
el corazón convulsiona
palpita apenas ante tal horror
Mis ojos se hinchan
quisieran cegarse ante tanto dolor
Mi garganta se aprieta
no puede nombrar lo que sucedió
Mi cuerpo sólo grita
ante aquel terror
La muerte ha llegado
y una parte de mi se paralizó
Son bellos recuerdos
Martirios por hoy
Fuiste un tesoro
Fruto de mi amor
Mis lágrimas corren
ante el cuerpo que vivió
su calor ya no queda
su existencia se desvaneció
¿Que hacer ante la muerte?
¿Que hacer ante el dolor?
No quiero que el odio
inunde mi corazón
Mis brazos me pesan
los brazos de amor
cogieron tu cuerpo
pequeñito sol
Te fuiste luchando
suplicio que ví
Ya no soy capaz
de por ti llorar
es tanta la pena que no puedo hablar
Escribo estas palabras
escribo por nosotras
pocos se imaginan
tal complicidad
Éramos una
ibamos a la par
Ay que dolor tan grande
perderte así nomás.
Hermoso mi niña como todo lo tuyo, ese dolor y esa falta la tenemos en nuestra alma, pequeña hermosa nos regalaste tanta dulzura, ternura que el corazón se desgarra sin tu presencia te amabamos pequeña hermosa.
ResponderEliminar